La idea de que un género tan formalizado ya no tiene mucho espacio para generar sorpresas es comprensible en este punto de la historia del post-punk, que comenzó más cerca del inicio de la Segunda Guerra Mundial que en la actualidad. En gran medida, el tercer álbum de Deeper y su debut en Sub Pop, Careful, confirma esos pensamientos. La banda parece estar siguiendo el idioma y no al revés, ya que sigue el guión tradicional post-punk de timbres de guitarra nervudos (y Wire-y), sintetizadores claustrofóbicos, voces aulladas/nasales/murmuradas y secciones rítmicas tensas y esqueléticas.
Sin embargo, esto no quiere decir que ¡Cuidado! tampoco es una interpretación tremendamente deliciosa y ultraescuchable de la forma; de hecho, a pesar de la consiguiente e inevitable dureza, se puede obtener un extraño consuelo al escuchar esos tropos probados ejecutados con una precisión estilísticamente tan leal, como ver una película de atracos perfectamente dirigida en la que el conocimiento del giro no es un impedimento. para disfrutar del viaje. Desde este punto de vista, ¡Cuidado! muestra que Deeper son hábiles artesanos y sus obras son magníficas maravillas arquitectónicas. En muchos otros géneros no sería suficiente, pero en un género con pautas tan estrictas, ¡Cuidado! es una contribución bienvenida a una larga tradición.