EspañolCómo Prince hacía su trabajo como nadie más: un legado musical
Pocos nombres nos vienen a la mente con más facilidad que Prince cuando pensamos en las estrellas de la historia de la música. Prince era un icono absoluto, mucho más que un simple vocalista. Para él, la música era una forma de vida viva y vibrante. Su ética de trabajo era simplemente asombrosa; fue ese mismo impulso el que lo ayudó a realizar un conjunto de trabajos que todavía inspiran a artistas y fanáticos hoy en día.
Toda una vida en la música
Para Prince, todo era música. Todos sabían que grabaría toda la noche, a veces hasta el último minuto en que tenía que tomar un autobús o un avión para el próximo lugar. Nunca tenía tiempo libre; cada momento de vigilia era una oportunidad para hacer algo. Tenía una rutina muy estricta que pocas personas podían seguir, ya estuviera de gira o en el estudio.
Este respeto por su profesión se reflejaba en cada aspecto de su trabajo. Prince podía tocar muchos instrumentos. Además de dirigir, también hacía los coros. Muchas veces, incluso terminaba una canción en un solo día; Él escribía, cantaba y mezclaba todo por sí mismo. Nadie más podía hacer canciones de calidad tan rápido.
Detrás de la primera toma
Prince tenía una forma muy especial de grabar que era muy propia de él. Mientras que muchos artistas hacen varias tomas para que todo salga perfecto, Prince casi siempre prefería la primera. Creía que la emoción capturada en esa primera toma era la más honesta y real, y estaba dispuesto a aceptar cualquier defecto que viniera con ella. Esto aseguraba que su música tuviera esa calidad emocional y honesta que conectaba con la gente.
Esta forma de pensar también afectó su forma de hacer música. Prince era conocido por "desproducir" canciones, llevándolas a su nivel más básico. Un ejemplo famoso es la canción "When Doves Cry", que primero hizo con capas de sintetizadores y guitarras, pero que luego redujo quitando la línea de bajo. Es lo que le da a la pista su sonido austero y cautivador.
Una bóveda de obras maestras inacabadas
Como Prince era un artista tan prolífico, creó mucha más música de la que jamás tendría tiempo de lanzar en una vida. De hecho, en su famosa bóveda se guardan cientos de kilos de música secreta, la mayor parte de la cual nunca ha sido escuchada por el público. Es difícil imaginar la cantidad de música que se guarda en esta bóveda. De hecho, algunos han comparado su trabajo con el de compositores tan famosos como Mozart.
Su obra grabada es vasta, pero solo una pequeña parte de ella ha sido publicada. Se rechazaron decenas de canciones fantásticas porque no encajaban con la idea del disco en ese momento. Esto ha llevado a que la bóveda de Prince se considere una fuente de historia musical con suficientes canciones para llenar discos durante décadas.
Manteniendo viva una tradición musical
Desde que la gente se dio cuenta de lo importante que fue realmente el trabajo de Prince, todas sus cintas se han recopilado y guardado a salvo. Su bóveda es mucho más que una simple colección de cintas; es una fuente de excelencia artística llena de música de todas las épocas y estilos. Sin embargo, existe escepticismo sobre si el material guardado en la bóveda se hará público alguna vez. Pasarían décadas antes de que toda esa información pudiera ser recopilada y compartida con el mundo.
Prince dejó un legado de creatividad y devoción inagotables por su trabajo. Su ética de trabajo, su forma de hacer música y la enorme cantidad de música inédita que dejó atrás hacen que siga siendo influyente hasta el día de hoy. Prince sigue siendo una inspiración para sus seguidores, músicos y artistas, y les demuestra que la única forma de ser verdaderamente bueno en su talento es trabajar en ello durante toda la vida.